He tenido la fortuna de pasar el fin de semana pasado en Copalinga. Se trata de una finca regentada por unos señores belgas que llevan 16 años viviendo allí. El establecimiento cuenta con un bosque húmedo amazónico de 100 hectáreas, que pueblan una increíble variedad de aves, insectos, serpientes, anfibios y algunos mamíferos grandes (de los que se tiene noticia por cámaras-trampa infrarrojas) como un Puma, ocelotes y monos. Las cabañas están construidas con arreglo al más absoluto respeto por el entorno pero con una calidad extraordinaria. Autogestiones energía y recursos de agua. Limpieza y atención en el servicio para un lugar en el que sólo pueden habitar 20 personas a la vez. Un remanso de paz y naturaleza. Una maravilla.
Copalinga from The Land of Pink & Grey Diseño on Vimeo.