De nuevo nos vamos. Tras unas semanas de descanso y recuperación de nuestra pequeña odisea marinera, hacemos los petates y nos volvemos al proyecto inicial de voluntariados. Empezamos por donde lo dejamos, en casa de los Gibson, en Bretaña. Después de eso, una casa con caballos en Alsacia, y, luego, una granja en la República Checa, donde quizá acabemos sabiendo algo de mecánica de coches clásicos… La aventura sigue. Es ya.